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Muchos autónomos y pequeñas empresas centran sus estrategias de negocio en aumentar las ventas, cuando reducir los gastos es igual de importante para lograr la rentabilidad esperada. No se trata de cancelar servicios o contratos sino de encontrar un punto óptimo sin mermar la calidad. Hay muchas medidas que se pueden poner en práctica que solo implican cambios de hábitos y que generan resultados inmediatos.

Una de las cuestiones que más preocupa a autónomos y gestores de pequeños negocios es saber si los clientes están dispuestos a pagar los precios que han establecido para sus productos o servicios. Determinar esos precios conlleva un análisis estratégico muy profundo en el que se combinan varios elementos.

En momentos de crisis como los que atravesamos ahora la supervivencia de autónomos y pequeños negocios puede depender de una buena Gestión de Tesorería.

En esta guía se presentan de forma sintética los pasos principales de una de las funciones de gestión y control más importantes de todo negocio, ya que permite anticiparse y mantener un equilibrio

Un error muy común que se suele cometer en pequeños negocios es darle poca importancia a esta función de compras, realizando las mismas sin establecer un sistema adecuado o diseñar una estrategia. Planificar la adquisición de bienes o servicios implica añadir valor al negocio, es decir, cuanto más se cuide la forma en que se realizan las compras más beneficio se puede generar.